¡Hasta siempre Penda!¡Hasta siempre Begne!

Con Mari durante los bailes de una boda

La primera tormenta del año empezó muy pronto, el día 10 de mayo exactamente, apagando aquel gran incendio que se propagó en Segou, pero la propia estación húmeda no ha llegado hasta hace poco; un mes y medio más tarde de lo habitual. Agricultores locales ya daban por perdidas algunas de sus cosechas. Las tormentas continuas por fin han llegado y traen de vez en cuando el añorado frío (añorado únicamente por mí, ya que ellos aborrecen las bajas temperaturas). A veces, les enferma antes un par de horas de viento fresco que trabajar durante toda una semana bajo el ardiente sol ¡El cuerpo es una máquina de costumbres! 

Paula ya da sus primeros pasos

A parte de la agricultura, ahora también emplean bastante tiempo en la ganadería. Durante la época seca únicamente recogen a los animales por la noche, dejándoles vagar durante todo el día en busca de alimento. Ahora, con los cultivos preparados en todo el pueblo y la aparición de leopardos y hienas, las reses serán vigiladas durante todo el día por gente local haciendo turnos de mañana, tarde y noche. 

Y es que no se trata de eliminar a escopetazos el problema de las hienas o leopardos, que únicamente cazan para sobrevivir en el mismo lugar donde queremos adentrarnos, sino de cuidar nuestro ganado y protegerlo como antiguamente se hacía y que aquí por suerte siguen practicando. No puedo evitar pensar en nuestro lobo ibérico y sus tristes problemas con ciertos “ganaderos” que se olvidaron en que consiste realmente la práctica de la ganadería. 

Hawa y Ami

Con la época de lluvias, vuelven todos aquellos chicos desplazados a las afueras para estudiar. Traen alegría y frescor al pueblo. La gran mayoría vuelven contentos pero otros llegan con cierta desilusión por un mal resultado en las esperadas notas. ¡Cogerán energías durante estos meses! Existe una baja tasa de chicos que continúan su formación académica después del colegio dentro de la reserva. Aproximadamente 7 chicos de todo el pueblo de Segou se desplazan a Kedougou para preparar el bachillerato y únicamente tres chicos se encuentran estudiando en las Universidades de Dakar y Sant Louis. Los jóvenes que llegan de la universidad vuelven irreconocibles. Cuentan sus complicados primeros meses allí, sin conocer a nadie y embarcándose en una nueva vida pero detallan con alegría su aprendizaje diario y el descubrimiento de todo aquello. Además, vuelven con la apariencia física notablemente cambiada. Llegan impecablemente vestidos. Ahora, su día a día cambiará, y durante estos meses cambiarán las clases por largos días ayudando en los cultivos familiares. 

Ahora es época de una mayor actividad turística por la zona. Segou deja de ser ese pueblo solitario que es durante el resto del año, dejando pasar a unos cuantos turistas que se desplazan hasta aquí para visitar la preciosa cascada. Habitualmente, no suelen quedarse más de un día o dos, para luego desplazarse hacia otros pueblitos con encanto de la zona. La estación biológica Fouta Jallon de Dindefelo se convierte estos meses también en sitio turístico que visitar y encantados explicamos nuestro trabajo en este lejano lugar. 

Este mes ha sido un poco extraño, con bastantes contratiempos, algunos no demasiado buenos. La distancia a los escasos o inexistentes medios hacen de éste, un lugar bastante hostil en momentos difíciles. Situaciones fácilmente abarcables en otros lugares, aquí sólo queda la aceptación y la impotencia de esperar finales inevitables. Una impotencia que te deja desolada por notar en tus propios dedos la injusticia de un mundo dividido en zonas de tan diferente desarrollo ¡Nadie dijo que esto sería fácil! Y por tanto, aprender a valorar todo de forma más intensa se convierte en tu camino a seguir. Disfrutar de cada momento y de cada instante con todo y todos aquellos que te rodean. 

Nuestra querida Penda y la pequeña Ami

¡Hasta pronto!